El gobierno de Viedma, a través de la secretaría de Planeamiento Urbano, Obras y Servicios Públicos, que conduce Gastón Renda, busca reactivar pequeñas obras domiciliarias o urbanas que la normativa municipal exige a los frentistas.
«Nos reunimos con el secretario de de la Mutual Obreros de la Construcción, Raúl Martínez, para dialogar sobre la normativa que establece la obligatoriedad de construir cercos y veredas en terrenos baldíos», explicó Renda, y agregó que «es una exigencia para los frentistas que desde el sector de los obreros de la construcción se observa como una posibilidad de recuperar demanda laboral».
«El intendente Pedro Pesatti nos pidió que evaluáramos la forma de aplicar la normativa considerando las distintas realidades de nuestros vecinos y su capacidad de pago y poder adquisitivo», indicó el funcionario municipal»
«El intendente cree que es una buena oportunidad para generar mano de obra a los trabajadores de la construcción, pero nos pidió evaluar el impacto en el bolsillo de los vecinos de los barrios populares, y establecer alguna mecánica sensata para su aplicación, equilibrando ambos intereses», indicó el funcionario.
Además, Renda informó al titular de la Mutual que «desde el gobierno de Viedma estamos evaluando presentar nuevas ordenanzas para establecer un cesto domiciliario obligatorio y exigir la plantación de árboles en las veredas de los frentistas».
Renda expresó finalmente que establecer un modelo de cesto obligatorio «va a contribuir a mantener la ciudad más limpia, ya que es alarmante la baja cantidad de cestos por manzana, lo que genera voladura de basura por la rotura que producen perros en la calle o porque simplemente se esparce por acción del viento».
